Saturnalia (Sub Pop, 2008) navega por las constantes de Dulli con un protagonismo esta vez mayor de Lanegan. Es cuando éste alza la voz por encima de la de su compadre (The Stations, Bête Noire, Seven stories underground) cuando el disco adquiere unas texturas climáticas presentes en los mejores trabajos del ex líder de Screaming Trees en solitario, aunque envueltas por el tejido apelmazado de las formaciones de Dulli. Salvo Seven… los pausados cortes de Saturnalia resultan tediosos y vacíos de sangre, y los más cañeros (Idle hands) acaban por perderse en la bruma de su sonido sobrecargado. Después del último segundo añoré a Lanegan a palo seco, el de Field songs o Whiskey for the holy ghost y no me quedaron más ganas de volver a escucharlo con su colega gemelo.
Nota: 5/10
No hay comentarios:
Publicar un comentario