sábado, enero 29, 2011

GREATEST HITS 102: ETERNAL LIFE (JEFF BUCKLEY)

Nos vamos haciendo mayores y no es necesario que nos lo recuerden. La edad no descansa para nadie ni para nada. Este blog mismo llega ahora a su post número 800. Va madurito ya el amigo, como veis. Y resiste. Como todos… espero. Jeff se quedó antes en mitad del camino y aún se echa de menos todo lo que no pudimos seguir escuchando de él. Tampoco hubo vida eterna para Buckley jr., pero nos dejó eternas canciones como ésta. Fue la primera que escuché este año, hace casi un mes, en la celebración de la primera noche de 2011 en el lugar en el que con más frecuencia nos juntamos unos amigos. Allí estaba el que la grabó para una selección de música habitual en el local. Luego llegaron más amigos y lo pasamos bien. De eso se trata. Yo sigo escuchando canciones.


BONUS TRACK 87: SOUL JOURNEY (GILLIAN WELCH)

Esta vez tardé en decidirme por escoger entre mi música para volver a un disco escuchado hace tiempo. Me apetece hacerlo para no descuidar las huellas de lo memorable. Y quizá porque cierta melancolía me visita estos días incluso recibiendo buenas noticias, me decidí por este Soul journey (Acony, 2003) de Gillian Welch, por lo mucho que me gusta ese color azul de la portada (también ‘blue’ es la melancolía), por el grato recuerdo que me había dejado entonces, cuando completé la discografía de esta sensible mujer campestre que desde entonces, con solo cuatro discos, ha estado bastante callada.


No hay más que verla, que parece salida de una granja, alejada del ruido y el vicio urbanos, acostumbrada a bañarse en los ríos o a cabalgar por las praderas, para imaginar que si esta chica hace música, en ella se escuchan apagados violines, dobros y guitarras dolientes. Tal cual. Antes de este álbum había firmado Time (The revelator), una sublime pieza de orfebrería acústica. Soul journey mantiene sus emocionantes violines, añade más ritmos, simples percusiones, algún teclado, y levanta un poco el ánimo pese a ese tono tristón tan habitual en Gillian Welch. Disco hermoso, un viaje del alma por exquisitas canciones como Look at Miss Ohio, Wayside/Back in time, One monkey o Wrecking ball para cerrar la sesión. Ideal para tiempos blues.

viernes, enero 28, 2011

LIVE IN 102: ANI DIFRANCO (O2 SHEPHERD’S BUSH EMPIRE, LONDON 2011)

A veces celebras un grato reencuentro, o de repente te das cuenta de que lo necesitabas. Como por ejemplo con una chica con la que tuviste algo durante un cierto tiempo; la vuelves a ver, os ponéis al día, recordáis viejos tiempos, malos y buenos recuerdos, y acabáis en el sofá o de nuevo en la cama, y luego vuestras vidas prosiguen por caminos separados. Yo me acabo de reencontrar con Ani Difranco. Cumplí con mis obligaciones y me lancé a la carrera para llegar a la hora en punto, con diez minutos de antelación. La esperé arriba pero muy cerca del escenario. La volví a ver. Y disfruté.


Ella sola y sus guitarras, a las que mima y maltrata al mismo tiempo, las pellizca y las mima, le cubren su menudo cuerpo, las levanta y las abraza. Ella sola llenó el teatro Shepherd’s Bush, de nuevo caluroso y con un público entregado que la recibió y despidió con ovaciones. Porque la mereció Anticipate en el arranque y Untouchable face en el ‘farewell’. Y Shameless, o Gravel, o Two little girls, o Both hands… y por mi parte, Smiling underneath o una versión demoledora de Which side are you on? que le cantó a Pete Seeger en su noventa cumpleaños y se trajo esta noche a Londres. La hora y media me supo a gloria.

Se bastó ella sola, Ani, para emocionar y hacer reír con sus palabras y sus bromas, su risa. Un carisma tierno que fluye por toda ella. Pequeña gran, grande Ani. Te conocí hace unos quince años, ¿recuerdas?, cuando me descubriste Dilate. Tenías siete discos antes y grabaste otros doce después. Prometes más este año. No te he perdido la pista, aunque te tenía olvidada. Pero ¡cuánto me alegro de volver a verte!

miércoles, enero 26, 2011

VOLUME ONE 230: GO-GO BOOTS (DRIVE-BY TRUCKERS)

No debería escribir sobre lo que no me gusta o me decepciona. Uno siempre se siente más satisfecho cuando recuerda y comparte la emoción de un gran momento o un bello descubrimiento. Y lo que no me gusta últimamente, entre tantas cosas a las que presto el mínimo de ociosa atención, es lo que aparece sin necesidad en este mundillo del rock, y es tanto… Pero perderé el tiempo por un instante tras la absurda reflexión de este enfermo de la música para regalar una simple advertencia sobre el último disco de Drive-By Truckers, el décimo. ¿Por qué ya tantos? Go-go boots (PIAS, 2011) no aporta nada en la carrera de esta buena banda que tuve el placer de presenciar hace unos cuantos años en un fantástico directo en Gijón. Desde 2006 han venido firmando disco por año pero desgastando la fuerza de su brillantez hasta acabar por fabricar trabajos faltos de contenido e identidad, como le ocurre a Go-go boots, el más deslucido, el más insulso. Es un manojo de canciones rutinarias, parecen perezosos descartes, quizá lo sean o quizá lo son (pero lo eran las de The fine print (2009) y aún había convicción y poderío en algunas de ellas). Tras el magnífico The Dirty South (2004), me voy perdiendo, me voy cansando, y ellos apagando. En esto último, anodino y vacío, se salvan dos cortes y medio. Tomaros un descanso largo.

Nota: 4/10

sábado, enero 22, 2011

GREATEST HITS 101: DO THE EVOLUTION (PEARL JAM)

Porque hace falta desconectar un rato y enchufarse a otra cosa por un par de horas o más. Metérselo bien dentro a todo volumen de camino a las miradas inolvidables o de vuelta a casa al cobijo de los contactos confidentes. A toda caña mejor, dejándose la garganta, con esa rabia que nunca perderemos. No dejamos de estar en plena evolución hacia cualquier parte.


For Diego & Luismi


VOLUME ONE 229: LOW COUNTRY BLUES (GREGG ALLMAN)


Pues blues campestre de baja fidelidad, para ser más precisos, grabado así como turbio, enraizado, pantanoso y algo rústico. Porque T-Bone Burnett le ha metido mano a lo nuevo de Gregg Allman por su cuenta, apartado de su banda y después de trece o catorce años sin presentar algo en solitario. No es nada memorable su trabajo firmado solo con su nombre, excepto el lejano Laid back, por eso quizá Allman se ha dejado guiar por un tipo, Burnett, que se está ganando la confianza de una nómina de veteranos (Robert Plant, John Mellencamp, BB King, Elvis Costello, Elton John) a base de revestir sus discos más recientes con lujosas producciones de espíritu y sabor añejo.

Lo nuevo de Gregg, Low country blues (Rounder Records, 2011) suena a Burnett, ayudado por sus músicos cercanos, los que brindan a una buena parte de su tarea más fresca unas guitarras profundas y percusiones siniestras. Poco del universo sonoro de los Allman Brothers se aprecia en esta casi completa colección de versiones de temas blues, salvo en el tema original co-escrito con Warren Haynes, Just another rider, lo mejor de la función. Buen trabajo, pero nada excepcional. Una apuesta a una baza segura, fiable y que recibirá generales aprobaciones de la crítica.

Nota: 7/10

lunes, enero 17, 2011

VOLUME ONE 228: KISS EACH OTHER CLEAN (IRON AND WINE… FUCKING GENIUS)


Nota: 10/10


Evitando a toda costa entrar en las comparaciones, me apresuro a regalarle a esta obra maestra el 10 redondo y bien redondo. The shepherd’s dog tendría un 10.1, o un 11, como se premian a sí mismos algunos entrenadores de fútbol que despiertan las ganas de coger un arma y apuntar a su cabeza. No existe lo absoluto, por tanto. Iron and Wine, Sam Beam, en cambio, en un absoluto genio. Un músico brillante, un creador, un experimentador, un tipo querido. Llevo metiéndomelo en vena estos dos días. In the reins, su perro mágico, The creek… y su último trabajo, Kiss each other clean (Warner, 2011). Cuatro veces ayer, una más hoy. Lo machaco y disfruto tanto que no me quedan ganas de escuchar más música en lo que qued de año que no venga firmada por él. Lo demás será una minucia, algo discreto, algo correcto. Me siento pletórico.


Kiss each… se abre y se cierra a lo grande, a lo gigantesco. Con temazos con aura de himnos de tiernas arrugas (Walking far from home) o de retorcida y desgarrada grandilocuencia (Your fake name is good enough for me). Entre la salida y la meta, juegos malabares de precisión, arqueología bizarra, sencilla dulzura. Y no me voy a poner a describir la música de su nueva maravilla porque no acierto a saber cómo expresar con palabras la esplendorosa excitación que me produce. Intentadlo vosotros. Disfrutadlo. Ojalá que tanto como yo. Fucking Genius!!!

sábado, enero 15, 2011

GREATEST HITS 100: DANCING IN THE MOONLIGHT (THIN LIZZY)

Ya sé que ando perezoso y escribo poco últimamente (llegarán pronto las crónicas de algunos discos esperados), pero no puedo dejar de cumplir con mis obligaciones y debo alimentar a esta criatura tan querida como es este blog. La dieta de estos últimos días consiste básicamente en las grandes canciones, porque se bastan para hablar por sí solas y sobran mis palabras. Ésta recuerda, por ejemplo, las noches en Camden, donde siempre puedes entrar en estupendos pubs, pedirte una negra y que te dé la bienvenida Lizzy con este temazo que me despierta al Springsteen de sus mejores años. Cheers!


jueves, enero 13, 2011

MOMENTOS


En alguno de tus momentos estuve yo, como tú estuviste en todos los míos. Te vi, te oí, te hablé y te sentí de nuevo tan cerca que parece que nunca nos hemos separado. Yo vuelvo a caminar un poco más adentro en el laberinto.

domingo, enero 09, 2011

GREATEST HITS 99: CROSSTOWN TRAFFIC (JIMI HENDRIX)

Porque para eso están los grandes, quienes una vez fueron dioses incluso para los que no creen. Están para acompañarte una tarde, para arreglártela, para que no la olvides cuando empiezas a perder la memoria. Un chute de Jimi es sano siempre a tiempo.


jueves, enero 06, 2011

GREATEST HITS 98: EMBRYONIC JOURNEY (JEFFERSON AIRPLANE)

Para encauzar, el futuro un pequeño viaje al pasado. A aquellos días coloridos de flores y libertad. El aullido rockero de la psicodelia quedó a un lado en esta hermosa pieza acústica. Jorma Kaukonen cabalga metálico en su guitarra nostálgica hacia un tiempo perdido pero nunca olvidado. Este viaje embriónico es una melodía de despedida para entrar en la cama con una sonrisa.


miércoles, enero 05, 2011

ESTÚPIDOS Y SOÑADORES


He vuelto a escribir. Lo hago todos los días prácticamente, incluso ahora. Pero esta vez he vuelto a recuperar esos impulsos incontrolables de prosa y verso que tenía enterrados desde hace tiempo. Lo estoy haciendo desde hace un par de semanas. Y sé por qué. Porque somos tan estúpidos como soñadores, tan ilusos como irracionales. Al mismo tiempo. Y nos gusta. Esta es una muestra:


Entraron en mis sueños

en escenas diferentes

primero una después otra

las tenía a mi alcance

y las besaba

y no se marcharon

cuando volví a estar despierto.