sábado, junio 30, 2012

LIVE IN 130: ISLE OF WIGHT FESTIVAL (V)


Duró más de tres días, una semana en la que rompimos con el guión y nos liberamos de las rutinas, salimos de un mundo y entramos en otro. La lluvia, el barro, las caminatas, los ferrys, los autobuses en el piso de arriba, el té en una terraza, las compras, las calles, los parques, las fotos, las habitaciones, la madrugada y el amanecer en Ryde, Londres, ‘escoitar o noso idioma lonxe da nosa terra’, las risas, Tom, Eddie, Bruce, la música, el amor.

Yo no estuve en Woodstock… estuve en el festival de la Isla de Wight… contigo.

LIVE IN 129: ISLE OF WIGHT FESTIVAL (IV) BRUCE SPRINGSTEEN & THE E STREET BAND


Nos vemos otra vez, tío. Estás en plena forma, vaya, por ti no pasan los años. Ya sé qué me vas a contar, qué me vas a ofrecer: tu voz subiéndonos al escenario o llevándonos a las nubes, tu sudor resbalando por la cara y salpicando tu guitarra, tu alegría gritándonos, tus carreras contra la fatiga desde el primer minuto hasta casi tres horas después, tus manos que tocan las nuestras en primera línea, tus huevos y tus entrañas. Cincuenta, sesenta o setenta mil almas que estamos delante de ti absorbidos por tu música. Ahí estoy yo en éxtasis con el solo de Nils en Because the night, con la nostalgia que perdura cuando cantas No surrender, con tus berridos callejeros en Spirit in the night, con el saxo fresco del heredero de Big Man en Dancing in the dark, con vuestras voces en Wrecking ball haciendo que broten mis lágrimas, abrazándonos los unos a los otros… con tu felicidad. Eres un fiera jefe, un bestia, un monstruo, un amigo. We love you.

viernes, junio 29, 2012

LIVE IN 128: ISLE OF WIGHT FESTIVAL (III) PEARL JAM


La cuarta vez ya no sientes exactamente lo mismo que la primera. Además, estás otra vez lejos, no como cuando casi rozabas la barba de Eddie la primera de las veces, aunque por suerte las pantallas son grandes y, salvo algún desliz, recogen bien lo que sucede en el escenario. Allí están. De vuelta (¿en realidad se marcharon?) con sus veinte años a cuestas. Seguimos gritando entre la multitud.




¿Con cuál van a empezar?, te preguntas otra vez. Arrancan el motor despacio, con Unthought known, que no te esperabas, y cogen velocidad con Last exit y Hail hail hasta The fixer. Eddie se enciende, la banda se espabila, se emociona con Better man, lleva el concierto al éxtasis. Otra vez Pearl Jam, saltando y haciéndote volar todavía cuando alargan Porch o Even flow y se preparan para la despedida con Alive. Gracias por estar ahí.

Llueve, tienes que esperar a coger el autobús, no paras de caminar, te indican mal el camino los muy palurdos de esta isla y estás cubierto de barro hasta los huevos (bueno, no tanto). “La mierda más grande…” gritamos. No importa. Hemos vuelto a estar con Pearl Jam y hoy llegamos antes a casa.


jueves, junio 28, 2012

LIVE IN 127: ISLE OF WIGHT FESTIVAL (II) TOM PETTY & THE HEARTBREAKERS


Fue la razón principal por la que ponerse en marcha, buscar alojamiento y encontrar vuelos con cinco meses de antelación. Venía a Europa, y si no aterrizaba en España, daba igual hacer acto de presencia en cualquier parte del extranjero. La isla de Wight, por ejemplo, donde tendría excepcional compañía. El viernes, el primer día, después de Elbow, irregulares pese a su buena voluntad. Please welcome, Tom Petty & The Heartbreakers. Al fin!!!
Sabía lo que iban a tocar, el mismo repertorio de sus últimos conciertos en USA y Europa: 19 temas, un bis, Listen to her heart para empezar y American girl para terminar. Y me encontré lo que imaginaba. Ese sonido de limpia pureza, esa cercanía natural, esos musicazos que son Mike Campbell y Benmont Tench, el bueno de Tom al frente, un poco viejo y algo cansado. Muy correctos, desde luego, les faltó espontaneidad y un poco más de empatía, pero no oficio ni rigor, tampoco grandeza.
Dios, los tenía ahí delante, lejos pero bien colocado. Tom Petty y sus chicos. Canto, bailo, me abrazo, guitarreo, desgasto las palmas. Esta es una experiencia única. Vuelvo a los podios: bronce para Mary Jane’s last dance, plata para Something big, oro para It’s good to be king. Duermo tranquilo y feliz, y no solo porque los he visto.

miércoles, junio 27, 2012

LIVE IN 126: ISLE OF WIGHT FESTIVAL (I)

Yo no estuve en Woodstock… estuve en la Isla de Wight. 

Ocurrió en el 2012, en el undécimo año de la reactivación del festival de rock and roll aquel que había nacido en el 68 y se había interrumpido tras la edición del 70. Cuando Tom Petty y sus Heartbreakers, Pearl Jam y Bruce Springsteen y su banda cerraron cada una de las noches del fin de semana del 22 al 24 de junio.

Sucedió en Seaclose Park, a pocas millas de Newport llegando desde Ryde por serpenteantes carreteras estrechas acompañadas por casas unifamiliares a ambos lados del asfalto, prados húmedos, un par de posadas, otro par de pubs, una gasolinera, un canal y su embarcadero y el cielo abierto. 
Cayó un diluvio el jueves y embarró todo el lugar. Atasco, caos. Pero la gente siguió adelante. Se juntaron miles de campistas, miles de automóviles, miles y más miles de personas llegadas del continente, familias con sus abuelos y los críos más pequeños que extienden sus manteles y despliegan sus sillas del domingo para tragar comida china, hamburguesas, platos picantes y cerveza. Así pasan el fin de semana, en compañía, sin tener ni idea de quién toca en el gran escenario allá a lo lejos. Un hippismo familiar. Flores en el pelo. Muslos al descubierto. Chubasqueros y gorros. Atracciones de feria.

Un frío de la hostia, la lluvia que resbala, el barro en el que nos enterramos, un colapso en la salida, qué inútiles, cabreos, algún llanto, cansancio un día y otro y el último. La música que más nos gusta. Y bien que mereció la pena.

lunes, junio 18, 2012

( … )


Me bajo del tren unos días, lo que dura una semana y un poquito más. Subo a otro vagón que me conduce a mejores destinos. Me esperan Tom, Eddie y Bruce, un gran reencuentro, las calles que patear, el césped en que tumbarse, la cerveza que saborear, la isla que conquistar, la música que sentir, las personas que amar, el pasado y el futuro. Salud y hasta pronto.

jueves, junio 14, 2012

GREATEST HITS 130: IMPOSSIBLE GERMANY (WILCO)


Cuando me encontré con esta canción me abracé a ella sin soltarme en cada vaivén. Por sus venas navega una melancolía etérea y evocaciones paradisíacas que me empujaban a escucharla un día sí y otro también. Conviene darle un largo reposo a cada una de estas piezas magistrales para reencontrarse con su inquebrantable autoridad tiempo después y comprobar que su poder de fascinación sigue siendo el mismo. Estos tipos son así de buenos. Impossible Germany, un tema mayúsculo.

VOLUME ONE 266: BANGA (PATTI SMITH)


La letra al margen. Lo que me importa un bledo es todo ese discurso visual e interior que encierra la obra de Patti Smith, discos que hermanan la música y la poesía de un modo místico y un tanto arrogante. Le sobran esos versos, unos cuantos, a su último trabajo, descripciones recitadas que entran y salen… claro que entonces no estaríamos hablando ni escuchando a Patti Smith. Banga (Columbia, 2012), de todos modos, es un buen trabajo cargado con música de lo más sugerente, homenajes diversos y esa retorcida familiaridad que desprende su autora. Transcurre por terrenos cambiantes: se ofrece amable, crece denso y esquivo y se cierra onírico y crepuscular en el albor de un nuevo amanecer. Comienza y finaliza cercano, con la artista en una dimensión terrenal de entrada, que a medida que se acomoda en los temas se apodera de ellos y los convierte en lienzos introspectivos que transforman toda la obra en un conjunto artístico y conceptual inquietante.

Nota: 7/10

domingo, junio 10, 2012

LIVE IN 125: WILCO, OPORTO 2012


Esta vez quería el primer plano y conseguí plaza a un palmo de la barrera, al frente de la comunidad. Quería comprobar lo buenos que son, lo poco que necesitan comunicarse entre sí para que les salgan actuaciones perfectas, una canción detrás de otra. Desde el apabullante arranque con Art of almost hasta el sentimental final con The late greats. Wilco en su grandeza, los espasmos ruidosos de Nels Cline, el asombroso poderío rítmico de Glenn Kotche y el carisma reservado de John Stirratt y ese hobo al que se parece Jeff Tweedy. Concierto redondo: sublimes Impossible Germany y A shot in the arm, y para la galería Jesus etc, Via Chicago o I’m the man who loves you. Un festival sí, el Primavera Sound de Oporto, citas que añoran la intimidad pero que nos reconcilian con la magia de la música que tanto amamos. 

jueves, junio 07, 2012

VOLUME ONE 265: SPIRIT IN THE ROOM (TOM JONES)


Otros envejecen mejor. Ahora ya no se tiñe el pelo, despeja arrugas y presume de nieve en las entradas. El cuerpo lo conserva robusto, como ese vozarrón, este tigre, este león. Tom Jones está pletórico, sin baile, sin cachondas de cuero a sus pies, más meditativo y espiritual ahora, de vuelta a raíces bluseras y rockeras. Sus últimos dos discos son fantásticos, formados por versiones de John Lee Hooker y otros oradores de antaño en Praise & blame y de Simon, Cohen, McCartney o Waits en Spirit in the room (Island, 2012). Ethan Johns produce ambos trabajos, así que la música suena reposada y limpísima. En el último Jones se hermana con el  Johnny Cash crepuscular de las grabaciones americanas. Sigue riéndose, pero desde los altares del recogimiento. Un glorioso superviviente.

Nota: 8/10

sábado, junio 02, 2012

VOLUME ONE 264: AMERICANA (NEIL YOUNG & CRAZY HORSE)


Y bien que los quiero, pero… qué pesadez!

Pues sí, que está en horas bajas, solo o con los suyos, da igual. Después de aquella horrible etapa entre el 81 y el 87, ahora pasa por su peor periodo, porque desde Living with war no levanta cabeza el tío Neil. Da igual que ahora coja las viejas canciones de la guardería, los modelos de la tradición, el sentimiento de las raíces, Gallows pole, Clementine, Oh Susannah, This land is your land y toda esa pompa absorbida por la aspereza guitarrera de su furia testaruda. Que no, que todo es un coñazo difícil de aguantar hasta el final, Americana (Reprise, 2012). Si todo fuera como el penúltimo tema, la versión tranquila de Wayfair stranger, otra cosa sería, y bien que nos alegraríamos. Una pena.

Volveré a esperar a que el disco esté a 5 euros para llevarlo a la estantería.

Nota: 5/10 (porque eres tú, tío plasta)