Este hombre serio que escruta
algo impreciso o se busca a sí mismo en el margen izquierdo de la
cubierta es Luis Moro, músico tenaz y sesudo al que este blog
siempre ha seguido con íntimo aprecio y oído crítico. Vuelve a
hacerlo a propósito de El pacto, su sexto trabajo discográfico,
otra obra obcecada y profunda que reafirma la constante inquietud
creativa del músico coruñés, una esponja que absorbe esencias de
grandes autores del rock y el folk para extraer siempre agua limpia
de ellas, de naturaleza propia, de personalidad auténtica. Se
agradece esa seguridad. Pregunten a qué suena Luis Moro y le dirán,
tras descartar comparaciones, que suena “a Luis Moro”.
No me parece El pacto (Laboratorio Azul, 2017) su mejor
álbum, aunque, como en todos los trabajos del autor, contiene
elementos virtuosos que refuerzan la coherencia de su trayectoria. En
su colección de virtudes, el disco va un paso más allá que su
anterior obra, Cielo color burdeos, al definir con nuevos trazos los
perfiles de canciones en las que entran nuevos recursos
instrumentales de la mano del personal que se suma en el viaje a su Tribeca's Band. La música de Luis persigue la estimulación, quiere
ser vivida, y eso lo consigue con canciones de fabricación precisa y
ecos emotivos como Minibar, minibar, Budapest o la preciosa Lulú,
que comparte voz con Lucía Rolle, colaboradora de toda la vida.
Pero
en el apartado de puntos débiles no se debe pasar por alto la
tendencia a dejarse aletargar con canciones densas que confieren al
conjunto una sobrecarga de melancolía que hacen que el disco se vaya
apagando, sobre todo por culpa de una muy confesional y excesivamente
larga pieza, Apolo desolación, el único momento en el que el álbum
roza una pretenciosidad que no casa y no conviene a la música de
Luis Moro. Por fortuna (y a pesar de las dudas constantes con las que
el autor nos insistió), Lulú logra a continuación despedir el
disco con un inmejorable sabor de boca.
Te seguimos animando, maestro,
muy pocos hay como tú que peleen valientes con esto de la música.
Nota: 7/10