jueves, noviembre 10, 2005

VOLUME ONE 6: I’VE GOT MY OWN HELL TO RAISE (BETTYE LaVETTE)

Ocurre que basta a veces con que la portada de un disco te pida que lo compres. No hace falta siquiera saber de quién se trata. Si después celebras que has descubierto un gran disco o a un gran artista entonces felicitas a tu intuición y sabes que otras veces más podrás elegir a ciegas. Como me ha ocurrido con I’ve got my own hell to raise, el último trabajo, de este año, de una dama del soul portentosa, tapada por el peso y la fama de las grandes, Bettye LaVette.

Fue suficiente el perfil pintado de amarillo de su cara, sobresaliente de un fondo negro, su nombre en letras blancas en el centro y la sensación de que dentro se escondía una voz fuerte, un carácter recio, un escenario rodeado de humo, un público negro... No me equivoqué. También me ayudó mi reciente afición por la música funk y soul, por los músicos negros. Cuantas más geniales figuras vaya conociendo, mejor.

Ahora ya puedo dedicarme a encontrar otras producciones de esta gran señora LaVette, una artista de Detroit que pronto cumplirá 60 años, llegó a girar con James Brown, actuar con Cab Calloway y tener unos modestos éxitos de ventas y crítica en los años sesenta. Trabajó en Broadway, pero su carrera musical no tuvo mucha continuidad. En el año que se va acabando ha regresado con la misma majestuosidad, poderío y ganas que Solomon Burke hace unos años, con una voz rugosa gastada por los años pero aún llena de energía, rugidos amenazantes y gritos sugerentes. La acompañan sonidos de tugurio y una atmósfera de madrugada larga bañada por recuerdos sucios e historias secretas.

I’ve got my own hell to raise contiene curiosamente diez versiones de canciones de mujeres tan variopintas como Rosanne Cash, Dolly Parton, Lucinda Williams, Fiona Apple, Sinead O’Connor, Aimee Mann o Joan Armatrading. Poco o nada parecidas a sus originales, cada pieza de este álbum revela a un Bettye LaVette tan eufórica como seductora, tan soul lady como rock woman, una digna socia de Etta James, una colega de Tina Turner. Un tesoro.
Nota: 9/10

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Ahora mismo, estoy por la octava canción "How am I different" y me está gustando bastante. Creo que como suele ocurrir en mí deberé escucharlo más veces para ubicarlo, ubicarme y saborearlo... Hasta ahora este octavo junto con el séptimo "Little sparrow" y el segundo "Joy" excelentes, por cierto, cual es el tema de Lucinda Willians y Fiona Apple...
Coño... el noveno empieza interesante..

rubén darío dijo...

El de Lucinda es Joy y el de Fiona es el último, Sleep to dream.
Sigue, sigue disfrutándolo.