domingo, agosto 09, 2009
UNA VEZ
Ocurre una vez en la vida… quizá dos. Te cruzas con alguien que te mantiene estático y al acecho sin saber cómo actuar. No te da tiempo ni a imaginar cómo sería todo a su lado, sólo te preguntas cuál es el camino más corto para llegar hasta su cintura. Y mientras le das vueltas se marcha, se esfuma, te abandona con el recuerdo caliente de sus rizos ondulados, lo único que su piel permite tocar. Las demás historias permanecen guardadas en el baúl de la ficción.
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2 comentarios:
Siempre puedes estirar el brazo e intentar alcanzar con la mano ese momento.
Es arena que se lleva el viento...
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