Casi de un día para otro me planté en una sala de conciertos para asistir a una prometedora doble sesión de los grupos norteamericanos Mother Superior y Drive-By Truckers. Animé al mítico Quiroga a que me acompañase y nos pusimos en marcha camino de Gijón para disfrutar al máximo y sin decepción alguna de una colosal e inolvidable noche de rock and roll en el Parque del Piles, a la vera de las olas asturianas.
Mother Superior abrió la noche como perfectos teloneros de los DBT y en 50 volcánicos minutos de heavy soul avasallador se metieron a una entregada audiencia de unas 300 personas en el bolsillo. De su último álbum, el incendiario Moanin’, rescataron un puñado de canciones vigorosas, repasaron algunos temas de discos como Sin y Deep y agitaron en dos jugosos medleys estrofas reconocibles, entre otras, de los Rolling Stones (Get off of my cloud) y Led Zeppelin (Comunication Breakdown). Jim Wilson aprendió de su ex jefe de discos y giras Henry Rollins la habilidad para parecer que canta cuando sólo grita y con su Gibson inseparable en las manos y su clásica gorra en la cabeza se exhibió como un carismático líder y un guitarrista poderoso. Con sólo las cuerdas de Wilson, los dinámicos juegos de bajo de Marcus Blake y la agresiva batería de Matt Tecu, Mother Superior parecen desprender el sonido de más rockeros en escena, pero el trío se basta para contagiar a la audiencia del entusiasmo con que tocan.
El listón quedó muy alto para el grupo estelar de la función. Sí, pero los Drive-By Truckers se lo habrían puesto también por los cielos a Mother Superior si el orden de conciertos hubiera sido distinto. Tres rugosas guitarras unidas en armonía, consignas y recuerdos del estilo de vida sureña y unos cuantos lingotazos a morro de botellas de Jack Daniels sacaron a los Lynyrd Skynyrd a flote. El grandullón Patterson Hood lidera a los ‘camioneros’ con dramatismo contenido en sus versos y una sonrisa siempre dispuesta, pero la sequedad (y el acento casi incomprensible) del veterano Mike Cooley y la tardía energía del jovencito Jason Isbell consiguen convertir su directo en una experiencia acogedoramente familial. Los DBT acaban de publicar disco, el más relajado A blessing and a curse, del que no faltaron cortes de enganche fácil que ganan fuerza en vivo; una hora y media larga dejó sitio a grandes piezas de la megalómana Southern Rock Opera, del más alegre Decoration day y del impresionante The dirty South. Faltaron algunas de sus mejores melodías, un mal menor, inapreciable, tras un concierto que regaló asombrosos solos repartidos entre sus guitarristas, sentidas interpretaciones vocales de Hood, Cooley e Isbell y canciones crepusculares bendecidas con emotivos estribillos. El torbellino del Sur.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
4 comentarios:
Ya me tarda acomodarme el Jueves 30 entre los sudores del Mardi para escuchar los rezos y oraciones de la “Madre Superiora”. Tenia curiosidad por ver a esta banda en directo (como Mother Superior) y más después de leer esta crónica, mi boca ha empezado a segregar saliva esperando que el concierto este a la altura de lo redactado por el gran Rubén.
He sido afortunado de poder verlos como la Rollins Band cuando tenían el honor y privilegio de acompañar al grandioso HENRY ROLLINS por las tablas de escenarios del mundo entero. Y la verdad no desentonaban lo más mínimo al lado de un icono musical como HENRY. Esto dice mucho de este tridente musical venido de las americas, así que espero veros a todos por el Mardi el Jueves para recibir la comunión de la “Madre Superiora”.
No te decepcionará, seguro. Yo también vi a Rollins hace seis años con Mother Superior como banda y me quedé boquiabierto, alucinado. Aquella actuación fue como un huracán más furioso que el del mítico Neil con los Crazy Horse.
Ten en cuenta que en el Mardi el concierto durará más, y eso que mis 50 minutos en Gijón cundieron. Eso sí, protege tus oídos, porque al día siguiente aún tenía uno jodido por las caricias de la madre superiora.
Este jueves ha sido un gran concierto. "Mother superior" que más los conocía por su acompañamiento a Henry Rollins que por su trayectoria al margen. Rock auténtico, directo al hígado con un guitarrista asombroso (se demuestra cuando se basta solo para sonar con esa furia y energía desde el principio hasta el final) un batería energico, un bajista con enorme peso sonoro... y unos coros por los tres fascinantes.
Un poco repetitivos a mi gusto. Lo cierto es que no inventan nada pero...para que?... he de reconocer que los momentos que más me gustaron... me apasionaron
No tengo la vena rockera últimamente pero viendo cosas así uno nota que el rock sigue vivo por algunos rincones del planeta
llegando a extenderse a cuanta gotas a lugares como ayer en el Mardigrass
bravo Mother Superior
Sí, señor Dufresne. Ya lo decía, Neil Young, entre otros, "rock n roll will never die" (el rock n roll nunca morirá). Y demos gracias que así sea. Disfrutemos de cuanto roce nuestros oídos, pop, funk, blues, soul, rap, dance, reggae... todo lo que nos parezca bueno, pero nunca olvidamos, porque nunca nos faltará, el rock n roll!!!
Publicar un comentario