¿Quieres bailar rock and roll recién salido del estudio? Déjate mover por Let's rock (Easy Eye Sound, 2019), potente y divertido rock and roll para que todo tu cuerpo se encienda y retuerza, vibre, sude y se desahogue por gentileza y destreza de los Black Keys. Sensacional regreso, altísima banda. Aquí tenéis a un satisfecho suscriptor, excitado por la adicción.
Pues resulta -leo- que Dan y Patrick no se aguantaron el uno al otro después de Turn blue, grabado hace cinco años, como hacían ver en el videoclip de uno de sus nuevos temas, Go. Tras dedicar este tiempo a sus proyectos personales (en el caso de Auerbach, crear en solitario, con otro grupo y para otros músicos en su propio sello), con o sin terapia han vuelto a juntarse para dejar atrás la ambición psicodélica de su anterior (y excelente) álbum, y de paso al productor Danger Mouse. En su reencuentro retoman la fiebre rockera que, empapada de blues y garage, resbalaba por otro fantástico disco, El Camino (2011).
Let's rock arde con grasa rockera con lo que saben hacer tan bien, The Black Keys: canciones de estribillos incendiarios que trotan y galopan para saciarse de ellas rápido, sin llegar ninguna a los cuatro minutos. Temazos, unos cuantos: Lo/Hi, Walk across the water, Get yourself together, Breaking down. Muy muy bien.
Nota: 9/10
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