La supervivencia entre barrotes, resistencia contra la desesperación, reos terribles, víctimas sin defensa, un plan de fuga... Hay grandes películas del género carcelario que explotan muy bien estos elementos, lugares comunes de un universo cerrado en el que se pudre o redime la condición humana. También lo hacen grandes series de televisión, como Fuga en Dannemora. Dirige Ben Stiller e intervienen Benicio del Toro, Paul Dano y una repulsiva y extraordinaria Patricia Arquette.
El género juega con nuestro juicio, que en no pocos ejemplos se inclina hacia la simpatía por reclusos que están donde merecen estar. El sexto capítulo de los ocho de esta serie de Showtime se encarga de recordarnos que Matt y Sweat actuaron de manera despreciable en el pasado y por eso cumplen una condena perpetua en la prisión de máxima seguridad de Clifton, en Dannemora, al norte del estado de Nueva York. El espectador, hasta ese sexto capítulo, puede haberle cogido cierta simpatía a los personajes (por como resisten o por cómo se imponen), bien perfilados por un sobrio Dano y por un Del Toro más desatado, algo empeñado en querer parecerse a Marlon Brando, osados artífices de una fuga verídica mostrada por Stiller con una seguridad asombrosa, heredada del cine entre rejas de los años setenta y ochenta, con un dominio de la tensión ejemplar, expuesta magistralmente en un sublime quinto capítulo.
Mención especial merece Arquette, apoyo sexual y maternal de la pareja de reclusos, esposa despreciable, vulgar y fea, bajeza humana sin vergüenza. Vean esta serie, siéntanse atrapados en las vidas desoladoras que confluyen en una prisión donde el ser humano carece de importancia.
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1 comentario:
Fabulosa serie con actores muy grandes .... me encantó!
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