Dos años atrás concluía un breve texto en este blog afirmando que Ian Noe, al que descubría entonces sin casi darme cuenta, merecía ser seguido desde ya. Me reafirmo en todo lo escrito con motivo de su primer álbum para elogiar ahora el segundo. En todo: en la madurez de su juventud prodigiosa, en la belleza honda de sus narraciones, en la altura emocional que alcanza su música. Noe escribe, canta e interpreta con la herencia natural de los poetas que en sus primeros pasos trazan el camino hacia la sabiduría contando las historias que tienen más cerca. Ese don lo arroja sobre los surcos de este hermoso River fools & mountain saints (Lock13 Records, 2022), con temas para saborear cervezas junto al escenario del salón donde se afana una banda (Pine Grove (madness), POW blues) o para dejarse acariciar mientras se apaga la tarde sobre los Apalaches (Tom Barrett, Ballad of a retired man, Appalachia haze). No te esperes de él un engreído aprendiz, sino un modesto alumno muy aplicado.
Nota: 8/10